viernes, agosto 21, 2015

Como todo proceso, la creación artística, tiene su modelo en la Naturaleza.
La preparación de los materiales opera en el campo: Alto y ancho. Norte, sur, este, oeste.
El bastidor y la tela: La preparación del terreno.
El carboncillo es la simiente sobre el lienzo.  Regada con el fluir de las primeras manchas acuosas.
El germen comienza a emerger. La mirada ilumina el desarrollo  abonado con pigmentos y aglutinantes.
La observación continua y el cuidado del progreso conducen al resultado final.

Al trabajar en tres dimensiones, la referencia espacial, está en su propia naturaleza. El soporte son las dimensiones originarias. La idea es la intención. Los bocetos son la siembra.
Los cinceles los materiales de labranza.
La iluminación visual, los bruñidos y los acabados asisten al desenlace del proceso.
Cartografía. El paso del tiempo. Mapa y detalle  70x50cm. 2015

jueves, agosto 20, 2015

©M.J.Vela
La obra y su proceso parten de una necesidad, de una idea sensible.
Se asienta en una tecnología que (en mi caso) requiere una elaboración minuciosa.
      a) Disposición del bastidor y montaje con tejido especial.
      b) Imprimación preparatoria.
      c) Desarrollo de una emulsión aglutinante que adhiere el pigmento al soporte.
LA PINTURA:
 1. Dibujo a partir de la idea inicial
      a. Y sobre él, las primeras manchas de color.
      b. Y la sorpresa visual del desarrollo.
 2. Segunda sesión:
      a. La lucha tras el primer esbozo
      b. Las manchas
      c. La deconstrucción
 3. La redención
      a. Los nublados
      b. Cambios de tonos y colores
 4. Las manchas
      a. La reparación temática
      b. La simbiosis
      c. Los trazos ocultos
 5. Las dimensiones
      a. La brújula
      b. El trazo continuo
      c. La estructura
 6. La abstracción geométrica
      a. Las transparencias
      b. El equilibrio
 7. La mirada ajena 
      a. La fíbula

Natural, Naranjo, mixta s/tela 162x130cm. 2015